¡No llego!

  …No consigo hacer el trabajo como me gustaría, ni estar con mi familia como quiero, ni quedar con mis amigos con la frecuencia que me gustaría, ni dispongo de tiempo para mí… ¿Te suena familiar?
¿Qué nos está pasando?

¿Exceso de responsabilidad? ¿Culpabilidad a flor de piel? ¿Es ésta la única manera de conseguir salir adelante?

Si te planteas estas cuestiones es porque estás intentando hacer un buen trabajo, estar cerca de tu familia y conservar tus amistades. Creemos estar haciendo lo correcto y la sociedad nos corresponde con su aprobación y nuestros resultados. Pero ¿de qué sirve si nosotros sentimos que no llegamos?

¿Os acordáis de la historia del profesor de filosofía?
Un profesor en su clase de Filosofía, sin decir palabra, tomó un frasco de cristal grande y vacío y procedió a llenarlo con pelotas de golf.

Luego preguntó a sus estudiantes si el frasco estaba lleno. Los estudiantes estuvieron de acuerdo en decir que sí.

Así que el profesor tomó una caja llena de canicas y la vació dentro del frasco. Las canicas llenaron los espacios vacíos entre las pelotas de golf.

El profesor volvió a preguntar a los estudiantes si el frasco estaba lleno, ellos volvieron a decir que sí.

Luego…el profesor tomó una caja con arena y la vació dentro del frasco.
Por supuesto, la arena llenó todos los espacios vacíos, así que el profesor preguntó nuevamente si el frasco estaba lleno. En esta ocasión los estudiantes respondieron con un “sí” unánime.
El profesor enseguida agregó 2 tazas de café al contenido del frasco y efectivamente llenó todos los espacios vacíos entre la arena. Los estudiantes reían en esta ocasión. Cuando la risa se apagaba, el profesor dijo:
“QUIERO QUE OS DEIS CUENTA QUE ESTE FRASCO REPRESENTA LA VIDA”.
Las pelotas de golf son las cosas importantes, como la familia, los hijos, la salud, los amigos y todo lo que te apasiona. Son cosas, que aún si perdiéramos todo lo demás y solo éstas quedaran, nuestras vidas aún estarían llenas.
Las canicas son las otras cosas que importan, como el trabajo, la casa, etc.
La arena representa lo superfluo, como el vestido verde, el móvil nuevo, el coche, el bolso último modelo..
Así pues, el orden en que llenamos el frasco equivale a la importancia que le damos a las cosas:
“Si ponemos primero la arena, algunas pelotas de golf y canicas ya no cabrán en el frasco”.
“Si gastamos todo nuestro tiempo y energía en las canicas, nunca tendremos lugar para las cosas realmente importantes”.
“Difícilmente podremos disfrutar de lo superfluo si no hemos sabido tener primero lo importante”.
Presta atención a las cosas que son cruciales para tu felicidad. Juega con tus hijos, ve con tu pareja a cenar, practica tu deporte o afición favorita…
Uno de los estudiantes levantó la mano y preguntó qué representaba el café.

El profesor sonrió y dijo: “Muy buena pregunta… No importa cuán ocupada pueda parecer tu vida, siempre hay lugar para un par de tazas de café con un amigo”.

A la historia le añadiría un párrafo para que nos acordemos también de cuidar ese bote de cristal, nos parece resistente pero es frágil. Ese bote somos nosotros mismos. Dejar dentro del bote un poco de aire nos permitirá respirar y disfrutar mejor de las pelotas, de las canicas y de la arena.
Identificar las presiones que vienen de fuera, advertir cuando alguien está llenando nuestro bote de sus cosas, que no son las nuestras, reconocer cuando una de nuestras pelotas más importantes se está desinflando y necesita un cuidado ( = tiempo) especial, percatarnos de todo esto requiere mucha práctica.
Elegir cómo quieres llenar tu bote y deshacerse de todas las canicas y la arena que te sobre, no es fácil pero es la tarea que tenemos que llevar a cabo si queremos LLEGAR a nuestro sitio en la vida. Si respetamos el lugar para las cosas importantes; el resto, encontrará su sitio.
Piensa en ello mañana mientras te tomas un café con un amigo…